Soy más bien escritora amarga, de nostalgia y tristeza
pero hoy me alegro por cada día, noche y medio día
hoy agradezco lo vivido, y espero no seguir por la senda del olvido
sino no ya recordar para vivir sino olvidar para volver a aprender lo ido
hoy me alegro porque siento, soy y aunque a veces padezco
otras me embarga una alegría que es la definitiva
pero no hay alegría definitiva sin llanto hondo y profundo
o quizá sí exista , en las honduras de un sentimental pozo
No entiendo esta vida
jamás la entendí
no supe leer las hojas o las letras escritas en el viento
jamás entendí de qué trataba el cuento
aún así se que estoy en los adentros
de este cuento sin final
y lo que más me salta en señal
es que la infinitud se me antoja corta
en la vida que atardece sin remedio
entre el aire de fría noche venturosa
que se aproxima presurosa
al fin que es principio o no sé ya qué ciclo
hemos pasado y repasado
por tanto
tanto nos ha pasado y repasado
que no sé por qué mis mofletes son redondos
planos quedarían de tanto pasar por encima el tractor
del tiempo
Aún así me alegro por lo vivido, y lo por vivir venturoso u horroroso
aunque en la euritmia, en la medida está el centro
siempre fui de extremos que se tocan
en una canción de flauta
que no deja nada intacta
que siga el son, la canción
por favor
que si no moriré
de pavoroso aburrimiento sin rencor
que no hay nada mejor que aburrirse de aburrirse
es como ser de uno mismo el chiste
y reírse por no llorar o porque la carcajada
aleje cualquier mortaja
qué viva la vida
pues morir es doloroso
horroroso y nada venturoso,
pero qué viva la vida
porque sencillamente deseo vivirla
como si naciera de nuevo cada día
en cada albor se me representa mi voz
y me gusta, por primera vez,
tal flor