Soy una manzanita con abanicos en los ojos
que mi tía me llamaba manzanita
porque mi cara redonda es
y yo reía encantada
así tal como me ves
hoy mi tía no está
pero en mí sí que vive
y me recuerda eternamente
que estos abanicos negros
que pueblan mis ojos
no han visto belleza más bonita
que la de mi tía
que sus luceros azules
iluminan aún mi vida