Ayer compré un boli bic para llenar agendas estampadas de gris
sin embargo no escrito ni una letra de tiempo ensangrada
ni una piedra en el tiempo encallada
me siento tonta como ese boli que compro
que pago por su tinta y la sudo sin hombro
al que arrimar mis tristes pensamientos
en una toalla llena de piedras, rodeada, aislada
que no soy sino náufraga de mis sueños , destartalada
y cuando pienso en mí misma lloro de pena
no queda tinta en el boli , se ha secado en la arena
pero si la arena no es más que una piedra
esa piedra que me embota este cerebro d e bota
y hace que todo , otra vez no ya rebota sino rebrota
que estaría siglos rimando cual croqueta
en una toalla casi quieta
pero es tal mi aburrimiento
que la nave del viento
quitó la tinta ami boli en movimiento
y sólo me queda esta pantalla atorada
en las verjas del jardín de mi pena
para llorar versos al viento
y escribir sin otra que sentir un ciento
de sentimientos
que van y vienen, vienen y van
y ya me quedo sin argumentos
sin tinta en mi boli bic
pero con neuronas en mi cerebro
que pinté de azul bolígrafo
para que no pareciera un estropajo estilográfico
así que muero por encontrar esa rima salada
que me deje por siempre desatada