Cuando temas la misma muerte regar tu vida de negrura ascendiente
cuando temas que llega la hora prístina, el lugar exacto de cualquier terror
Mírale a los ojos, sencillamente
Afronta el temor
no hay otra forma de vida
que mirar de frente
aunque me pese lo estúpidamente realizado
mandado y envíado
porque me equivoqué sí
pero yo puedo aún mirar
tú quedaste ciego de tanto hablar